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CARACOLES A LA GORMANDA - Juan José Noguera Palau Ingredientes:
Caracoles Cebolla, laurel, pimienta negra, cayena, perejil, hierbas aromáticas ( romero, tomillo...) Picadillo Aceite y sal Ajos |
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Preparación: Limpiamos bien los caracoles y los coceremos. Al agua añadimos cebolla, laurel,
pimienta negra, ajo, cayena y los caracoles, perejil, sal y hierbas aromáticas (romero,
tomillo...). Una vez cocidos, los dejamos un buen rato en un escurridor, aunque si no
los vamos a hacer de manera inmediata, mejor dejarlos en el agua para que no se
sequen. Cortamos en trocitos muy pequeños lomo de cerdo, jamón algo grueso y longaniza.
En una cazuela grande ponemos aceite y, cuando esté moderadamente caliente,
echamos el picadillo preparado y algún que otro diente de ajo sin pelar. Tras unas
cuantas vueltas, retiramos la carne, apenas frita, y eliminamos los ajos. En este aceite
van ahora los caracoles bien escurridos y los freimos removiendo. Cuando estén bien
dorados, disminuimos la fuerza del fuego, echamos el picadillo y vuelta a remover
para que éste vaya entrando en los caracoles. Añadimos perejil bien picado y pimienta
negra. Todo esto se irá pegando a los caracoles y se meterá dentro. Si es preciso,
rectificar la sal y vigilar el aceite de la cazuela (ni excesiva cantidad ni que quede seco
el fondo). Cuando estén a punto de servir, los mojamos con vino tinto, mejor cuanto
mejor sea, y, al cabo de unos minutos, los espolvoreamos con harina. La cantidad del
vino y de la harina dependerá de la cantidad de caracoles. El vino dará sabor al caldillo
formado al freir los caracoles y la harina empapará el vino y el aceite que queden,
se freirá y se pegará a la concha de los caracoles con el perejil, la pimienta negra
y restos pequeños de carne. Al final, no sobrará ni aceite ni vino en la cazuela. Un
poco picantes, sin pasarnos, al punto de sal y acompañados con trocitos de carne frita. ¡BUEN PROVECHO!
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